Voy cruzando puertas sin mirar atrás

Esos días de mierda, en los que todo te sale mal. Te tenías que levantar temprano para hacer un trabajo, y te quedás dormida, genial! Lo hacés mas tarde. Pero no, viene mamá y te dice: hija se te hace tarde, bien. No tenés excusa, tenés que ir. Hacés tu maldito trabajo, comés. Y parece que todo mejoraba, pero que tonta sos. Te enamorás del primo de tu mejor amiga, si. Ese que nunca te va a dar bola porque tiene novia hace como 3 años, y bueno un par de años más que vos. Pero vos te pensás que si, porque sos estúpida. Llegás a casa, y mamá con su buen humor y tomando un mate te dice: hijita, tenés que limpiar esto y aquello, ah! y tu cuarto es un desastre limpialo también. Si mama. Cuando te predispones a limpiar, notas que tus putos cordones se desatan casa dos minutos, re divertido claro. No te importa, vos seguís yendo de acá para allá para ver por donde empezar. Cuando decidis hacer algo por el bien de la humanidad (de los seres que habitan tu cuarto digo) se te cae tu esmalte de uñas preferido,se rompe, y justo te lo compraste ayer!. Además se cae por todo el piso, y cuando lo querés limpiar: notás que tu querido esmalte manchó tu piso, mamá va a matarte (había pasado el piso esa mañana). Y por supuesto algo bueno no podía pasar, es el típico día de mierda. Mientras tanto, estas esperando que el chico se conecte, y justo cuando vas a espiar si esta on-line, ves que te había hablado! Pero vos tan entretenida sacando la mancha del piso (que no salió) no lo notaste. Pegate un tiro. Y no podía faltar, la típica llamada asesina que nunca (pero nunca) llega, y vos la esperás igual. Y como para terminar, creés que no existe ninguna fucking canción que te levante el ánimo. Si!, y todo eso te pasó durante la mitad del día. Ahora vamos a ver como sigue esto, y después te cuento (si es que sobrevivo, ja!).

{Hasta nunca}